Juan de Aragón y Castilla: Príncipe de Asturias. El deseado varón (1478-1497)
Juan de Aragón y Castilla: Príncipe de Asturias. El deseado varón (1478-1497)
En la historia de las monarquías europeas, siempre ha sido fundamental para continuidad de la dinastía. la existencia de hijos varones. Los reyes Católicos no estaban ajenos a esta circunstancia, en especial cuando solo se tiene una hija y ocho años después de su nacimiento no hay signos de un nuevo embarazo.
El deseo de los monarcas, se vio cumplido el 30 de junio de 1478 cuando la reina alumbró en los Reales Alcázares de Sevilla, al príncipe Juan que desde el momento de su nacimiento, ostento las dignidades de príncipe de Asturias y Gerona como heredero de las coronas de Castilla y Aragón, aunque se retraso su juramento en las cortes ya que el príncipe poseía una frágil salud. El parto de la reina contó con la presencia de cuatro testigos varones elegidos por el rey, para certificar que el niño era hijo de la reina.
Los reyes Católicos educaron a su hijo, como correspondía a un futuro rey, con una formación que comprendía tanto instrucción académica como militar. Desde muy temprana edad el príncipe Juan tuvo casa propia con pajes, sirvientes, y demás personas a su cargo, esto era costumbre en todas las monarquías europeas, para lograr que el heredero a la corona se familiarizara rápidamente con los asuntos de estado.
Siguiendo su costumbre de trazar alianzas con otros estados extranjeros, los Reyes Católicos comprometieron a Juan con Margarita de Austria, hija de Maximiliano I Habsburgo y María de Borgoña. La boda se celebró en la catedral de Burgos en abril de 1497, la pareja se enamoró y Margarita quedó embarazada, pero al poco tiempo juan cayó enfermo, cuando se disponía a asistir a la boda de su hermana Isabel. Los médicos pensaban que la causa de la enfermedad era la excesiva practica de sexo, por lo tanto recomendaron que estuvieran separados por un tiempo prudencial, hoy se sabe que el príncipe padecía tuberculosis.
El príncipe Juan murió el 4 de octubre de 1497 en la ciudad de Salamanca, su padre estuvo a su lado en tan delicado momento, la reina no se encontraba en la corte en ese momento. Cuando fue informada de lo ocurrido y vio el cadáver de su hijo dijo: "Dios me lo dio Dios me lo quito". La reina solía llamar a su hijo mi ángel, fue un golpe tremendo para ella del que nunca se recuperó
Margarita de Austria, se puso de parto de forma prematura y dio a luz una niña que nació muerta.
La opinión pública de la época, pensaba que el príncipe había muerto por practicar el sexo de forma frecuente, tan es así que décadas después el emperador Carlos V, aconsejaba a su hijo Felipe II no excederse demasiado con el sexo, pues tenía miedo a que a Felipe le ocurrirá lo mismo que a su tío Juan.
Conclusión: La muerte del príncipe Juan, impidió que se unificaran bajo una misa persona las coronas de Castilla y Aragón, habrían de pasar veinte años para que Carlos I de España y V de Alemania cogiera el testigo del príncipe Juan. .
En la historia de las monarquías europeas, siempre ha sido fundamental para continuidad de la dinastía. la existencia de hijos varones. Los reyes Católicos no estaban ajenos a esta circunstancia, en especial cuando solo se tiene una hija y ocho años después de su nacimiento no hay signos de un nuevo embarazo.
El deseo de los monarcas, se vio cumplido el 30 de junio de 1478 cuando la reina alumbró en los Reales Alcázares de Sevilla, al príncipe Juan que desde el momento de su nacimiento, ostento las dignidades de príncipe de Asturias y Gerona como heredero de las coronas de Castilla y Aragón, aunque se retraso su juramento en las cortes ya que el príncipe poseía una frágil salud. El parto de la reina contó con la presencia de cuatro testigos varones elegidos por el rey, para certificar que el niño era hijo de la reina.
Los reyes Católicos educaron a su hijo, como correspondía a un futuro rey, con una formación que comprendía tanto instrucción académica como militar. Desde muy temprana edad el príncipe Juan tuvo casa propia con pajes, sirvientes, y demás personas a su cargo, esto era costumbre en todas las monarquías europeas, para lograr que el heredero a la corona se familiarizara rápidamente con los asuntos de estado.
Siguiendo su costumbre de trazar alianzas con otros estados extranjeros, los Reyes Católicos comprometieron a Juan con Margarita de Austria, hija de Maximiliano I Habsburgo y María de Borgoña. La boda se celebró en la catedral de Burgos en abril de 1497, la pareja se enamoró y Margarita quedó embarazada, pero al poco tiempo juan cayó enfermo, cuando se disponía a asistir a la boda de su hermana Isabel. Los médicos pensaban que la causa de la enfermedad era la excesiva practica de sexo, por lo tanto recomendaron que estuvieran separados por un tiempo prudencial, hoy se sabe que el príncipe padecía tuberculosis.
El príncipe Juan murió el 4 de octubre de 1497 en la ciudad de Salamanca, su padre estuvo a su lado en tan delicado momento, la reina no se encontraba en la corte en ese momento. Cuando fue informada de lo ocurrido y vio el cadáver de su hijo dijo: "Dios me lo dio Dios me lo quito". La reina solía llamar a su hijo mi ángel, fue un golpe tremendo para ella del que nunca se recuperó
Margarita de Austria, se puso de parto de forma prematura y dio a luz una niña que nació muerta.
La opinión pública de la época, pensaba que el príncipe había muerto por practicar el sexo de forma frecuente, tan es así que décadas después el emperador Carlos V, aconsejaba a su hijo Felipe II no excederse demasiado con el sexo, pues tenía miedo a que a Felipe le ocurrirá lo mismo que a su tío Juan.
Conclusión: La muerte del príncipe Juan, impidió que se unificaran bajo una misa persona las coronas de Castilla y Aragón, habrían de pasar veinte años para que Carlos I de España y V de Alemania cogiera el testigo del príncipe Juan. .
Me encanta!
ResponderEliminarMuchas gracias
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